Michael Jackson: su muerte fue un homicidio
Provocado principalmente por "una intoxicación del anestésico propofol
Los Ángeles.- La muerte de Michael Jackson fue un "homicidio", provocado principalmente por "una intoxicación del anestésico propofol", según anunció el Instituto Forense de Los Ángeles.
El informe oficial hecho público este viernes es un extracto de la autopsia realizada al artista y se incluyen como factores del fallecimiento de Jackson otros fármacos que tienen como principio básico benzodiazepine, un compuesto empleado para tratar el insomnio y la ansiedad.
Medicamentos como propofol y lorazepam fueron señalados como causantes de la parada cardiorrespiratoria del cantante, aunque también se detectaron en los análisis restos de midazolam, diazepam, lidocaina y efedrina.
En el apartado sobre la causa de la muerte los forenses estimaron que se trató de un homicidio. Los resultados completos de la autopsia, incluidas las conclusiones de las pruebas toxicológicas, se mantendrán en secreto para uso interno de la investigación.
Michael Jackson falleció el 25 de junio en su domicilio de Los Ángeles y desde entonces las autoridades investigan la implicación de su médico personal, Conrad Murray, en su muerte.
Murray estuvo con Jackson durante sus últimas horas y reconoció en los interrogatorios que administró propofol y otras sustancias al 'rey del pop' para ayudarle a conciliar el sueño. Jackson falleció el 25 de junio y será enterrado el 3 de septiembre.
LAS ÚLTIMAS HORAS DE MICHAEL JACKSON
El día antes de la muerte de Michael Jackson le retiró el Propofol, aseguró Murray a los investigadores.
1.30h: Murray le suministra a Michael primero un Valium para ayudar a dormir a Jackson.
Aprox. 2.00h: El 'rey del pop' no puede dormir. Su médico de cabecera le inyecta el tranquilizante Lorazepam. No es efectivo, Jackson se mantiene despierto.
Sobre las 3.00h: El siguiente tranquilizante. En esta ocasión le inyecta al paciente Midazolam, pero Jackson tampoco puede dormir.
Aprox. 5.00h: El cardiólogo prueba con una nueva inyección de Lorazepam.
7.30h: Una nueva inyección de Midazolam. Sin resultados. Según su propia declaración, Murray controlaba el pulso del cantante permanentemente.
Sobre las 10.40h: Murray suministra por instancia de Michael Jackson 25 gramos de Propofol. Tras ello Jackson se habría dormido finalmente.
Tras 10 minutos: Murray abandona, según su propia declaración, la habitación para ir al baño. Allí permanece, así lo afirma, a lo sumo dos minutos.
Sobre las 11.00h: Cuando llega dos minutos después, Michael Jackson ya no respira. Murray habría iniciado la reanimación y le habría dado Flumazenil, indicado para sobredosis de medicamentos. El médico hace llamar al hijo mayor de Michael Jackson, Prince Michael,
Entre las 11.18 y 12.05h: Murray mantiene tres conversaciones telefónicas, cuya duración total es de 47 minutos.
12.21h: Se produce la llamada a la central de emergencia 911.
Con quién mantuvo las llamadas de teléfono y por qué fueron tan largas hasta que se produjo la llamada final a los servicios sanitarios, aún es desconocido.
Cuando llegaron los enfermeros, Murray admitió haber dado a Michael Jackson el medicamento Lorazepam. Sin embargo, ocultó haberle suministrado Propofol.
Provocado principalmente por "una intoxicación del anestésico propofol
Los Ángeles.- La muerte de Michael Jackson fue un "homicidio", provocado principalmente por "una intoxicación del anestésico propofol", según anunció el Instituto Forense de Los Ángeles.
El informe oficial hecho público este viernes es un extracto de la autopsia realizada al artista y se incluyen como factores del fallecimiento de Jackson otros fármacos que tienen como principio básico benzodiazepine, un compuesto empleado para tratar el insomnio y la ansiedad.
Medicamentos como propofol y lorazepam fueron señalados como causantes de la parada cardiorrespiratoria del cantante, aunque también se detectaron en los análisis restos de midazolam, diazepam, lidocaina y efedrina.
En el apartado sobre la causa de la muerte los forenses estimaron que se trató de un homicidio. Los resultados completos de la autopsia, incluidas las conclusiones de las pruebas toxicológicas, se mantendrán en secreto para uso interno de la investigación.
Michael Jackson falleció el 25 de junio en su domicilio de Los Ángeles y desde entonces las autoridades investigan la implicación de su médico personal, Conrad Murray, en su muerte.
Murray estuvo con Jackson durante sus últimas horas y reconoció en los interrogatorios que administró propofol y otras sustancias al 'rey del pop' para ayudarle a conciliar el sueño. Jackson falleció el 25 de junio y será enterrado el 3 de septiembre.
LAS ÚLTIMAS HORAS DE MICHAEL JACKSON
El día antes de la muerte de Michael Jackson le retiró el Propofol, aseguró Murray a los investigadores.
1.30h: Murray le suministra a Michael primero un Valium para ayudar a dormir a Jackson.
Aprox. 2.00h: El 'rey del pop' no puede dormir. Su médico de cabecera le inyecta el tranquilizante Lorazepam. No es efectivo, Jackson se mantiene despierto.
Sobre las 3.00h: El siguiente tranquilizante. En esta ocasión le inyecta al paciente Midazolam, pero Jackson tampoco puede dormir.
Aprox. 5.00h: El cardiólogo prueba con una nueva inyección de Lorazepam.
7.30h: Una nueva inyección de Midazolam. Sin resultados. Según su propia declaración, Murray controlaba el pulso del cantante permanentemente.
Sobre las 10.40h: Murray suministra por instancia de Michael Jackson 25 gramos de Propofol. Tras ello Jackson se habría dormido finalmente.
Tras 10 minutos: Murray abandona, según su propia declaración, la habitación para ir al baño. Allí permanece, así lo afirma, a lo sumo dos minutos.
Sobre las 11.00h: Cuando llega dos minutos después, Michael Jackson ya no respira. Murray habría iniciado la reanimación y le habría dado Flumazenil, indicado para sobredosis de medicamentos. El médico hace llamar al hijo mayor de Michael Jackson, Prince Michael,
Entre las 11.18 y 12.05h: Murray mantiene tres conversaciones telefónicas, cuya duración total es de 47 minutos.
12.21h: Se produce la llamada a la central de emergencia 911.
Con quién mantuvo las llamadas de teléfono y por qué fueron tan largas hasta que se produjo la llamada final a los servicios sanitarios, aún es desconocido.
Cuando llegaron los enfermeros, Murray admitió haber dado a Michael Jackson el medicamento Lorazepam. Sin embargo, ocultó haberle suministrado Propofol.